Hoy se conmemora la promoción de la salud a manera de decirle NO a un vicio popular (considerada su enfermedad, una pandemia), hacemos referencia: al cigarrillo.
Muchas veces solemos oír acerca de los efectos nocivos en nuestro organismo proporcionados por dicha sustancia; aquí en nuestro blog asociaremos éste vicio con los hábitos alimentarios; ya que, muchos fumadores desayunan con un cigarrillo, fuman después de comer para "hacer la digestión", lo utilizan para aliviar el hambre, y de otras maneras lo han incorporado a la alimentación.
Aquí, les informaremos que por su carácter de potente tóxico el mismo impide a nuestro cuerpo asimilar muchos nutrientes indispensables para su buen funcionamiento, ya que de los mismos depende el conservar la salud de nuestro organismo.Puntualizando los efectos del tabaco sobre la nutrición, encontramos (vía http://www.vitonica.com/dietas/efectos-del-tabaco-sobre-la-nutricion):
- Incrementa las concentraciones de colesterol en sangre a razón de 0.33 mg/dl por cada cigarrillo fumado.
- Aumenta el gasto energético en reposo.
- Disminuye las concentraciones de vitamina Cdebido a la demanda del organismo para neutralizar los radicales libres que se desprenden del humo del cigarrillo.
- Altera el sentido del gusto y reduce la percepción del sabor de los alimentos.
- Disminuye la concentración en sangre de vitamina B1, vitamina B2 y vitamina B5.
- Genera deficiencia de ácido fólico que se expresa en una menor concentración de glóbulos rojos.
- Disminuye las reservas de vitamina B12.
- Aumenta la excreción de calcio.
- Disminuye la concentración de selenio con función antioxidante en el organismo.